Los bollos blancos de Zamora son un dulce tradicional que forma parte de nuestra identidad gastronómica. Suaves, esponjosos y de color característico, se elaboran siguiendo recetas artesanales con harina de calidad, huevo, azúcar y manteca, lo que les da un sabor auténtico e inconfundible.
Se consumen especialmente en fiestas populares y Semana Santa, donde acompañan al café, al chocolate caliente o al vino dulce, pero también son perfectos para disfrutar en cualquier momento del día.
✔ Elaboración artesanal.
✔ Producto típico zamorano.
✔ Tiernos y con sabor casero.
✔ Perfectos para celebraciones o como detalle gastronómico.
Peso aproximado: 250/600 gr..
Conservación: lugar fresco y seco.